"Está mala la cosa" Su mano lenta encendió el taxímetro. "Con decirle que ayer no pude parar la olla. Me levanté cuando todavía estaba de noche y llegué cuando ya estaba oscuro. No llegué con na´. Mi mujer trata de arreglárselas, pero no pude. Y mi niñita está más flaca. Creo que está enferma" Se sobó la barbilla miserablemente afeitada. El asiento trasero vacío en el espejo retrovisor tornó patética su confesión. La calle mezquina no atraía pasajeros ...una vez más. Detuvo el llanto con el cigarro. "Está mala la cosa", murmuró para él. Su mano lenta apagó el taxímetro.
Rodolfo Depix
Santiago en 100 palabras
2003